CÉSAR FORNIS VAQUERO
UNAI IRIARTE ASARTA
Universidad de Sevilla
La crypteia espartana como mecanismo de control de los hilotas.
A lo largo de la Historia prácticamente todos los estados han requerido siempre de ciudadanos que velaran, en algunos casos de manera imperceptible para el resto, por la seguridad y la pervivencia de los mismos. A mediados del siglo IV a. C. Esparta había perdido buena parte de su arche y, sobre todo, había sufrido la amputación de la fértil Mesenia, aproximadamente la mitad de su territorio ancestral, cuna y fuente del hilotismo, el sistema de esclavitud colectiva que garantizaba para los hómoioi o ciudadanos de pleno derecho el poder consagrarse por entero a los asuntos públicos y a la preparación militar, liberados de las actividades banáusicas. Es en este complejo contexto cuando la crypteia aparece mencionada por primera vez en las fuentes. A pesar de concebirse inicialmente como un rito de paso por Platón, no tardó en ser descrita por Aristóteles, y subsecuentemente por Plutarco, como una forma de violencia extrema de los espartiatas sobre los hilotas, mesenios en su mayor parte, para mantenerlos bajo control. La escasez de fuentes, por un lado, y la aparente contradicción de las existentes, por otro, condicionadas por el inherente secretismo del Estado lacedemonio, hace necesaria una reflexión tanto sobre su origen como sobre la finalidad social de esta peculiar institución. Son varias las cuestiones que quedan en el aire y que todavía no han sido respondidas: ¿es esta práctica una consecuencia de las guerras mesenias, del seísmo del 464 o bien se trata de una medida excepcional del siglo IV relacionada con el fracaso de su vocación imperial? ¿hasta qué punto estamos hablando de un rito iniciático/de transición o de asesinatos premeditados? ¿es un proceso de selección de la futura elite sociopolítica? Más allá de intentar responder a estos y otros interrogantes, la finalidad de nuestra comunicación es averiguar cuán eficaz resultó para Esparta servirse de los cryptoi para la supervivencia del kosmos licurgueo.